En la actualidad surgen multitud de dudas de porqué y cómo perdió la oreja una de las grandes leyendas de la historia del arte, Vicent Van Gogh. A ciencia cierta aún se desconoce si este suceso se trata únicamente de una leyenda o una realidad. Además son demasiados los rumores que circulan por el mundo sobre este acontecimiento tan impactante del autor de los girasoles, ¿pudo realmente cortarse Van Gogh su propia oreja?
La versión más popular cuenta que en una fría noche de 1888, Van Gogh discutió con su ‘mejor amigo’ Paul Gauguin. Preso de su cólera y navaja en mano decidió cortar una de sus orejas, aunque se desvaneció en el suelo debido a la gran hemorragia. Cabe destacar que a pesar de su estado de gravedad, Vicent tuvo la suficiente fuerza para envolver esta en un trapo, para regalársela a una prostituta.
¿Una simple discusión amorosa?

Historiadores de todo el mundo siguen estudiando este suceso, la parecer existen pruebas que demuestran que Vicent no cometió este acto por su propia voluntad. Hans Kaufmann y Rita Wildegans, llevaron a cabo una investigación que afirma que el pintor creó esta leyenda para tapar la verdadera realidad del suceso. Además, se piensa que fue el propio Gauguin el que realizó este fatídico gesto con una espada al discutir con Vicent, con el que presuntamente compartía algo más que una amistad.
¿Roces familiares y la locura de Van Gogh?

Desde otro punto de vista se encuentra el testimonio de la escritora Bernaddette Murphy en su libro ‘La oreja de Van Gogh: la verdadera historia’. Cabe destacar que esta piensa que Vicent sí pudo realizar este dramático suceso al enterarse de la boda de su hermano, Theo. Según relata en el libro, Vicent sentía un gran amor por su hermano, lo que le suscitó un sentimiento de rabia que finalizó con el pintor frente al espejo donde pintaba sus autorretratos, navaja en mano y dispuesto a cortar una de sus orejas.
¿Explicación sobre una de sus obras?

Para los habitantes de la ciudad francesa de Arlés, Vicent realizó este gesto como único motivo de unión a una de sus grandes obras, ‘Espectadores en los toros’. Se cree que el pintor pudo cortar su oreja como crítica a lo que se sigue haciendo en la actualidad con estos animales. Aunque esta teoría tiene ciertos puntos que no tasan entre sí, puesto que en Francia no se cometían estos actos en 1988.
En la actualidad este suceso sigue y seguirá rondando las mentes de los estudiosos más asiduos al estilo y arte de Van Gogh. Además, continuará existiendo la duda de sí realmente tuvo el valor de automutilarse su propia oreja o fue una segunda persona la que intervino en el acto. En definitiva, lo que verdaderamente queda probado es que tendrán que pasar muchos años hasta que una persona consiga descifrar qué sucedió realmente aquella noche de 1988.