La Comisión Europea da un paso importante contra los desechos electrónicos y los inconvenientes para el consumidor, causados por la prevalencia de cargadores diferentes e incompatibles para dispositivos electrónicos.
Años de trabajar con la industria en un enfoque voluntario, ya redujeron el número de cargadores de teléfonos móviles de 30 a 3 en la última década, pero no pudieron ofrecer una solución completa. La comisión está ahora presentando legislación para establecer una solución de carga común para todos los dispositivos móviles.
Con la propuesta para una Directiva de equipos de radio revisada, los dispositivos de carga rápida para nuestros dispositivos móviles se armonizarán: USB-C se convertirá en el puerto estándar para todos los teléfonos inteligentes, tabletas, cámaras, auriculares, altavoces portátiles y consolas de videojuegos portátiles.
Además, la Comisión propone separa la venta de cargadores de la venta de dispositivos electrónicos. Esto mejorará la comodidad de los consumidores y reducirá la huella ambiental asociada con la producción de cargadores, apoyando así las transiciones ecológicas y digitales.
Margrethe Vestager, vicepresidente ejecutiva de una Europa apta para la era digital, dijo: “Los consumidores europeos se sintieron frustrados durante bastante tiempo porque los cargadores incompatibles se amontonaban en sus cajones.
Le dimos a la industria mucho tiempo para idear sus propias soluciones, ahora es el momento adecuado para una acción legislativa para un cargador común. Esta es una victoria importante para nuestros consumidores y el medio ambiente y está en consonancia con nuestras ambiciones ecológicas y digitales”.
El Comisionario Thierry Breton, responsable del Mercado Interior, dijo; “Los cargadores alimentan todos nuestros dispositivos electrónicos más esenciales. Con cada vez más dispositivos, se venden cada vez más cargadores que no son intercambiables o no son necesarios.”
“Estamos poniendo fin a eso. Con nuestra propuesta los consumidores europeos podrán utilizar un solo cargador para todos sus dispositivos electrónicos portátiles, un paso importante para aumentar la comodidad y reducir el desperdicio”.
La comisión propone:
• Un puerto de carga armonizado para dispositivos electrónicos: USB-C será el puerto común. Esto permitirá a los consumidores cargar sus dispositivos con el mismo cargador USB-C, independientemente de la marca del dispositivo.
La tecnología de carga rápida armonizada ayudara a evitar que diferentes productores limiten injustificadamente la velocidad de carga y ayudará a garantizar que la velocidad de carga sea la misma cuando se utiliza cualquier cargador compatible para un dispositivo.
• Separas la venta de un cargador de la venta del dispositivo electrónico: los consumidores podrán comprar un nuevo dispositivo electrónico sin un nuevo cargador. Esto limitará la cantidad de cargadores no deseados comprados o que no se utilicen. Se estima que la reducción de la producción y eliminación de nuevos cargadores reducirá la cantidad de desechos electrónicos en casi mil toneladas anuales.
• Información mejorada para los consumidores: los productores deberán proporcionar información relevante sobre el rendimiento de la carga, incluida información sobre la potencia requerida por el dispositivo y si admite la carga rápida.
Esto hará que es más fácil para los consumidores ver si sus cargadores existentes cumplen con los requisitos de su nuevo dispositivo o les ayudara a seleccionar un cargador compatible. Combinado con las otras medidas, esto ayudaría a los consumidores a limitar la cantidad de cargadores nuevos comprados y los ayudaría a ahorrar 250 millones de euros al año en compras innecesarias de cargadores.
La revisión de la Directiva sobre equipos de radio es parte de la acción más amplia de la Comisión para abordar la sostenibilidad de los productos, en particular la electrónica en el mercado de la Unión Europea, que será el foco de una próxima propuesta sobre productos sostenibles.
Próximos pasos previstos para la nueva transición
La propuesta de la Directiva deberá ser adoptada por el Parlamento Europeo y el Consejo mediante el procedimiento legislativo ordinario (codecisión). Un periodo de transición de 24 meses a partir de la fecha de adopción le dará a la industria suficiente tiempo para adaptarse antes de la entrada en la aplicación.
Para tener en última instancia un cargador común, se requiere una interoperabilidad total en ambos lados del cable: el dispositivo electrónico y la fuente de alimentación externa. La interoperabilidad en el extremo del dispositivo, que es, con mucho, el mayor desafío, se lograra con la propuesta.
La interoperabilidad de la fuente de alimentación externa se abordará mediante la revisión del Reglamento sobre diseño ecológico de la Comisión. Este se lanzará a finales de este año y para que su entrada en vigor se pueda alinear con la propuesta de hoy.